Enfermedad que consiste en la ausencia de sudor; Es una incapacidad a transpirar ante estímulos determinados. Se debe a un trastorno de las glándulas ecrinas y apócrifas, que son las glándulas sudoríparas que se encuentran repartidas por todo el cuerpo del caballo y son las encargadas de mantener equilibrada la temperatura del animal. Se da en climas tropicales con mucha humedad y temperaturas elevadas. Les ocurre a caballos que no son capaces de adaptarse a estas condiciones medioambientales. La piel se seca perdiendo su elasticidad y volviéndose escamosa. Cuando sufren de anhidrosis, algunos caballos conservan cierta capacidad para sudar en ciertas áreas. Sin embargo, la mayoría de los ejemplares no son capaces de sudar por casi ningún área de su cuerpo. Los síntomas más reconocibles son la caída del cabello en la cara, la pérdida de pelo en las piernas, la ausencia de pelaje en la parte trasera, el rendimiento debilitado y la disminución del apetito. No hay tratamiento descrito, pero una vez diagnosticada la enfermedad es recomendable mantener al caballo en un entorno fresco con el fin de que vuelva a la normalidad la actividad de las glándulas sudoríparas.